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Parroquia
Cultura
La parroquia El Ingenio, situada en el cantón Marcabelí, provincia de El Oro, Ecuador, es una comunidad con una rica tradición cultural y un fuerte arraigo a sus costumbres. Su identidad se ha forjado a lo largo del tiempo a partir de la fusión de influencias indígenas y mestizas, las cuales se reflejan en sus festividades, gastronomía, música y tradiciones.
Uno de los aspectos más representativos de la cultura de El Ingenio es su música y danzas típicas, que forman parte esencial de sus festividades religiosas y cívicas. Durante las celebraciones, es común escuchar bandas de pueblo que animan las calles con pasillos, albazos y sanjuanitos, géneros tradicionales ecuatorianos que evocan la historia y el sentir de su gente. Las comparsas y bailes folclóricos, muchas veces organizados por las comunidades y escuelas locales, refuerzan el sentido de identidad y orgullo parroquial.
Las festividades más importantes de El Ingenio giran en torno a la religión católica, con celebraciones como la fiesta en honor a su patrono, que congrega a devotos de la parroquia y de otras localidades cercanas. Durante estas fiestas, se llevan a cabo procesiones, misas, eventos deportivos y espectáculos artísticos que reflejan el espíritu comunitario de los habitantes. Estas festividades no solo tienen un significado espiritual, sino que también son momentos de encuentro y unidad entre los pobladores.



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Comida típica
Gastronomía
La gastronomía es otro pilar fundamental de la cultura de El Ingenio. Sus habitantes se enorgullecen de su cocina, basada en ingredientes locales y preparaciones tradicionales que han pasado de generación en generación. Platos como el repe, una sopa espesa a base de guineo verde y queso, y la fritada, que consiste en carne de cerdo acompañada de mote y llapingachos, son algunos de los favoritos en reuniones familiares y celebraciones. Los dulces artesanales y bebidas como la chicha de maíz también forman parte del acervo gastronómico de la parroquia.
La gastronomía en la cabecera parroquial y en sus alrededores es un reflejo de la tradición y el arraigo cultural de sus habitantes. Entre los platos típicos más destacados se encuentran el tigrillo, el molido de maní, la gallina criolla, la sopa de arveja y el repe de guineo, todos ellos elaborados con ingredientes naturales y compartidos en un ambiente familiar.
El tigrillo, uno de los platos más representativos, se prepara a base de plátano verde cocido y molido, mezclado con queso y huevo, lo que le otorga una textura suave y un sabor inigualable. Esta delicia culinaria es apreciada por su valor nutritivo y por ser un emblema de la cocina local, disfrutado en desayunos y reuniones familiares.



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Fiestas
Historia
La parroquia El Ingenio fue creada el 28 de diciembre de 1987, convirtiéndose así en la primera parroquia del Cantón Marcabelí. Su cabecera parroquial es el caserío del mismo nombre, un lugar lleno de tradición y comunidad.
Fiestas Patronales y celebraciones
En la parroquia se mantienen vivas dos tipos de festividades: las fiestas de aniversario y las celebraciones religiosas. Entre las más destacadas se encuentran:
5 de septiembre: Fiesta religiosa que se extiende por dos días, llenando las calles de devoción y alegría.
18 de octubre: El sitio El Rosal celebra su aniversario con un día de actividades festivas.
El Rocío: A diferencia de los demás, este sitio no realiza festejos, aunque sus habitantes participan activamente en las celebraciones de la parroquia.
Estas tradiciones reflejan la identidad cultural de El Ingenio, donde la fe y la comunidad se entrelazan año tras año.



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Deportes
Recreación
Actualmente, la parroquia El Ingenio y sus sitios aledaños carecen de espacios públicos de recreación y canchas deportivas, lo que limita las oportunidades de esparcimiento y desarrollo físico para sus habitantes. Esta situación refleja una urgente necesidad, especialmente para la niñez y juventud, quienes requieren de áreas adecuadas para practicar deportes, fomentar la integración comunitaria y promover un estilo de vida activo y saludable.
La implementación de estos espacios no solo mejoraría la calidad de vida de los residentes, sino que también fortalecería el tejido social, incentivando la convivencia y el aprovechamiento positivo del tiempo libre.
